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Trasfondos de personaje

Este tipo de reglamento proporciona una capa de personalización adicional para los personajes de Dungeon Hack. En el momento de la Creación de personaje, el jugador puede elegir un Trasfondo que le otorgará ciertos beneficios adicionales, como mejoras pasivas o nuevos Conjuros o Técnicas que, de otra forma, estarían vetados para él.

Aquellos Conjuros o Técnicas que se obtengan gracias a adquirir una Habilidad inicial del Trasfondo no cuentan para el máximo impuesto por la Clase. Sin embargo, no será así para las obtenidas mediante las secciones «Conjuros o Técnicas opcionales».

Como Árbitro debes decidir si permites este tipo de adiciones al juego, que alteran de forma sutil pero significativa la experiencia de juego. El concepto está basado en los «Temas de personaje» de la cuarta edición del juego de rol más famoso de la historia.

Guardián

Como miembros de sociedades de élite u órdenes militares dedicadas a la preservación de un ideal, los guardianes son luchadores preparados para proteger al débil. Aunque la fuerza y el espíritu de lucha les son útiles, muchos se enorgullecen de usar la cabeza y no las manos. Los guardianes creen que su oficio no es para buscar la gloria o arriesgarse de manera innecesaria. Si las causas o la gente que protegen sólo pueden ser defendidas mediante el combate directo, entonces no dudan en desenfundar sus armas. De otro modo, si lo mejor para cumplir una misión es utilizar sigilo y subterfugio o escapar, que así sea.

Las órdenes de guardianes varían ampliamente de reino a reino. Algunas existen para proteger a otro grupo u organización, como altos sacerdotes de un Espíritu deífico particular, los miembros de un gremio de magos, o un linaje familiar que posee un gran destino o un legado mágico. Algunos juran proteger un tesoro o un lugar, como la llama de la forja en el corazón de una ciudadela enana, o el poderoso artefacto del bien que es ansiado por un señor demoníaco. Ciertas órdenes de guardianes son escuadras de mercenarios de élite, orgullosos de ofrecer la mejor y más leal protección que el oro pueda comprar. Sin embargo, la mayoría de los guardianes han jurado servicio a un reino. Trabajan como guardaespaldas de la familia real y miembros importantes de la corte, protegiendo tesoros y secretos del país, además de cumplir misiones de vital interés para la corona.

Crear un Guardián

Los personajes que se especializan en el combate cuerpo a cuerpo se convierten en los mejores guardianes. Guerreros y paladines son candidatos naturales para este tema de personaje, ya que combinan buenas capacidades para el combate cercano con una durabilidad excelente, una característica vital, ya que los guardianes deben estar preparados para llevarse un flechazo por sus protegidos si eso es lo que la situación requiere. Los clérigos militantes pueden volverse guardianes de vez en cuando, defendiendo a sus protegidos con sabios consejos al igual que fuerza de armas. Los ladrones y los cazadores también pueden ser buenos guardianes, ya que suelen ser menos obvios que otros personajes con armas pesadas, y tienen los talentos necesarios para esquivar peligros evitables en vez de enfrentarse a ellos.

Habilidad inicial

Los guardianes necesitan buenas habilidades en el combate cuerpo a cuerpo, y se espera que den lo mejor de sí para proteger a los aliados cercanos que se han enzarzado en el combate. El Contraataque del guardián te otorga un coraje inquebrantable. Con una zancada rápida, alcanzas a un aliado en peligro, protegiéndolo con tu propio cuerpo.

Beneficio: Aprendes la técnica Contraataque del guardián.

Contraataque del guardián

Al ver que un amigo está en peligro, te interpones y contraatacas..

  • Coste: 1 vez por combate
  • Reacción: un aliado en un radio de 10 pies (3 metros) de ti es atacado y tú no eres parte del ataque
  • Alcance: 10 pies (3 metros)

Efecto: tú y tu aliado intercambiáis posiciones, y te vuelves el objetivo del ataque. Tras resolver el ataque, puedes intentar realizar un ataque cuerpo a cuerpo contra el agresor.

Habilidades adicionales

Nivel 5

La habilidad para sentir problemas que otros no perciben no es algo que sucede de manera espontánea: es el resultado de años entrenando tu observación y tu capacidad para leer las intenciones de los demás. Un parpadeo de los ojos, un encogimiento de hombros, una hoja moviéndose sin brisa o un silencio repentino en el bosque es, para ti, una clara advertencia del peligro.

Beneficio: obtienes un +2 a las tiradas de Sabiduría para detectar emboscadas y traiciones.

Nivel 10

Muchas de las tareas de un guardián consisten en mantener a alguien en particular a salvo. Puedes haber sido asignado a un arcanista, haber jurado acompañar a tu protegido en sus viajes y defenderlo con tu propia vida. Puedes servir durante un tiempo como guardaespaldas de un noble importante a través de un territorio peligroso, o deber llevar al niño de la profecía a un lugar a salvo. Sin importar la naturaleza de tu obligación, has desarrollado un increíble instinto para el peligro. Cuando tu protegido te necesita, lo sientes en tus huesos.

Beneficio: elige una criatura para que sea tu protegido. Puedes sentir, de manera sobrenatural, cuando tu protegido está en peligro en un radio de una milla (1,6 km, ⅙ de un hexágono). Eres capaz de orientarte hacia él si no sabes dónde está, así como la distancia teórica que os separa. 

Durante los enfrentamientos, si una criatura que tú y tu protegido consideréis enemigo realiza alguna acción hostil contra él, obtienes un +1 a la siguiente tirada de ataque o lanzamiento de conjuros, así como al daño, que realices contra ése agresor.

Sólo puedes tener un protegido al mismo tiempo. Tu protegido debe ser alguien al que tu orden guardián haya jurado proteger. Hablando claro, no puedes designar a alguien como protegido si sus habilidades cuerpo a cuerpo igualan o exceden a las tuyas; se supone que debes proteger a alguien que no luche tan bien como tú.

Guardianes caídos

Un guardián aventurero puede ser parte de una poderosa orden, con aliados y refugios en numerosos lugares, o puede pertenecer a una organización al borde de la desaparición. Se sabe de hermandades que han caído a lo largo de las eras, dejando atrás miembros dispersos sin nada a lo que servir. Ciertas veces, éstos toman jóvenes aprendices y transmiten lo mejor que pueden las tradiciones de sus desaparecidas compañías. 

Otros abandonan sus recuerdos y prefieren hacer cualquier bien que puedan en el mundo, esperando encontrar una causa digna. Y, de vez en cuando, un joven guerrero encuentra una vieja reliquia o escucha la historia de una orden que lo inspira para tomar armas en nombre de una compañía que lleva tiempo desaparecida del mundo. Los guardianes sin una orden no llegan a tener los recursos de otro que sí, pero son libres de seguir sus conciencias allá dónde vayan.

Técnicas opcionales

Como guardián, te son familiares las técnicas para luchar de forma defensiva, protegiendo compañeros cercanos de los ataques, y permaneciendo alerta y preparado para los problemas. Dependiendo de la naturaleza de la orden a la que sirvas y las misiones que te sean encargadas, quizás puedas aprender a sacar lo mejor de estos talentos.

Defensa del guardián

La prueba más básica de las habilidades de un guardián es mantener a alguien vivo en medio de una complicada pelea cuerpo a cuerpo. Mientras permanezcas cerca, puedes rechazar golpes dirigidos a la persona que estés protegiendo y asegurarte de que ningún enemigo toma ventaja del flanqueo o de una apertura repentina.

  • Coste: 1 vez por combate
  • Requisito: nivel 2
  • Alcance: 5 pies (1,5 metros)

Efecto: espetas una orden imperiosa a un aliado para que esté atento a la trifulca. Hasta que vuelvas a actuar, ni tú ni tu aliado podéis sufrir Desventaja para esquivar un ataque o un conjuro.

Preparado para todo

Ya seas más observador que la mayoría de aventureros o te adaptes a las situaciones con una velocidad increíble, es casi imposible para tus enemigos sorprenderte. Cuando las flechas goblin empiezan a silbar a través del aire y tus compañeros están paralizados por la confusión, tú ya estás saltando a la contienda.

  • Coste: 1 vez al día
  • Requisito: nivel 6
  • Alcance: personal

Efecto: Usa esta técnica cuando comiences un combate sorprendido. Tu capacidad de reacción es tal, que ya no estás sorprendido y puedes actuar en cualquier momento durante el primer turno en el que actúan tus enemigos.

¡Cuidado!

Proteger la espalda o el flanco del compañero que lucha a tu lado es algo innato para ti ahora. Sin dudar un momento, te pones en medio del curso de un ataque para sufrirlo en lugar de tu aliado. Quizás puedas soportar mejor la herida o no, pero no hay mejor ejemplo del servicio a otros que enfrentrarse cara a cara contra la adversidad.

  • Coste: 1 vez por combate
  • Requisito: nivel 10
  • Reacción: un aliado al alcance es impactado por un ataque o conjuro que no te tenía como objetivo también
  • Alcance: 5 pies (1,5 metros)

Efecto: tú te conviertes en el objetivo del ataque o conjuro y tu aliado resulta indemne de dicha agresión. Después de resolver el ataque, si tus puntos de salud son superiores a 0, puedes recuperar 1d6 puntos de salud.


Imagen: Daghatar the Adamant por Zack Stella

Traducción y adaptación del tema Guardian (páginas 72 a 74 de la revista Dragon 399)

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